Los grupos hablan de 'delirio' y 'mentiras de distracción masiva' del PP.
Aguntín Yanel | Madrid
Actualizado martes 25/08/2009 13:44 horas
El PP no recibió los votos de ningún grupo del Congreso y vio rechazadas sus peticiones de que comparezcan con urgencia en la Cámara Baja -para hablar de una supuesta "persecución" del Gobierno hacia este partido- la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega; el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido.
Lo que sí recibió el PP fueron las críticas de los demás grupos, por haber pedido estas comparecencias sin haber aportado ni un mínimo indicio de las supuestas escuchas ilegales que los máximos dirigentes del PP han denunciado ante los periodistas pero no en los tribunales. Precisamente hoy, Soraya Sáenz de Santamaría no habló en ningún momento de "escuchas".
En respuesta a la portavoz del PP en el Congreso, desde el PSOE y los demás grupos dijeron que la supuesta "persecución y las escuchas ilegales" que denuncian los 'populares' son "un delirio" y "una mentira de distracción masiva", con el único objetivo de que no se hable de los casos de corrupción en los que están implicados miembros y dirigentes del Partido Popular.
El portavoz de los socialistas, José Antonio Alonso, dijo que las afirmaciones de los dirigentes del PP son "un conjunto de inventos, insidias y mentiras". Además, como Mariano Rajoy ha encargado a Sáenz de Santamaría que elabore un informe para demostrar que se persigue al PP, Alonso criticó que durante el mes de agosto los dirigentes 'populares' hayan "estado diciendo barbaridades" sin tener todavía esa información en la que poder sustentarlas.
Hoy, Sáenz de Santamaría ha señalado que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "tiene obsesión por Camps" y que el PP "no confía en el Gobierno ni en Conde Pumpido". La portavoz 'popular' en el Congreso ha asegurado que "casi todas las investigaciones abiertas contra el PP han quedado en nada. La causa contra 49 miembros del PP implicados en casos de corrupción ha sido archivada o no ha dado lugar a actuaciones judiciales, pero sí han sufrido la pena del escarnio público de los telediarios".
Los 'populares' Sáenz de Santamaría y Ayllón. | Efe
En su opinión, el Gobierno parece utilizar la consigna "que se hable del PP y no se hable de la crisis" porque, a su juicio, "quieren acabar antes con el PP que con el desempleo".
En este sentido, ha acusado a la Fiscalía de no realizar bien su trabajo: "Se detiene, se esposa y se exhibe a los diputados del PP, pero ¿qué actuaciones ha llevado la Fiscalia respecto al caso del Sr. Chaves, ni el director del CNI ni el directos de la Caja de Castilla-La Mancha? ¿Qué ha pasado con las filtraciones del 'caso Gürtel'? ¿Y con otros casos de corrupción que la Fiscalía ha decidido sismplemente archivar?
"La corrupcion", ha sentenciado Sáenz de Santamaría, "ha de investigarse aplicando la ley con el mismo rasero para todos, porque si no, estamos hablando de abuso de poder y de utilización ilegítima de las instituciones del Gobierno.
Por CiU, el diputado Jordi Jané ha anunciado la abstención de su grupo, se ha quejado del "clima de bronca" con el que se reanuda la actividad parlamentaria y ha emplazado al PP a trasladar sus denuncias a los tribunales.
Desde el PNV, su portavoz, Emilio Olabarría, ha indicado que su grupo se abstendría a pesar de considerar el debate de una naturaleza "un tanto esotérica", aunque ha asegurado que si el PP aportara una "sola prueba" incluso apoyarían la creación de una comisión de investigación.
El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao, ha señalado que no apoyarán las peticiones del PP al considerar que sus denuncias constituyen una estrategia de "defensa" ante el "cerco de sospechas" sobre corrupción que afecta, ha dicho, a este partido, y van camino de convertirse en una "paranoia casi tan delirante como la trama del 11-M".
Por su parte, el portavoz de IU-ICV, Gaspar Llamazares, ha justificado su voto en contra porque no quiere que "la mentira de destrucción masiva, poco creíble e indemostrable" del PP se convierta en un "delirio de persecución", ya que no ha podido presentar un mínimo de indicios que acrediten sus denuncias.
Francisco Jorquera, por el Grupo Mixto, ha votado en contra de las tres peticiones del Partido Popular por entender que obedecen a una estrategia del PP para levantar una "cortina de humo" cuyo único objetivo es "tapar los escándalos" que le afectan.
Blanco tampoco comparecerá.
La Diputación Permanente del Congreso -que sustituye al Pleno cuando no se celebran sesiones ordinarias, como ocurre en las vacaciones- también rechazó las peticiones del PP para que comparezca con urgencia el ministro de Fomento, José Blanco, a informar sobre elapagón del 15 de agosto en el aeropuerto de Barajas y los cortes ferroviarios de los días 10, 11 y 12 de ese mismo mes como consecuencia de lluvias torrenciales.
Los socialistas están dispuestos a que el ministro ofrezca todas las informaciones necesarias, pero no ven la necesidad de hacerlo con urgencia sino cuando se reanuden las sesiones ordinarias del Congreso en la segunda semana de septiembre.
Por la misma razón de no ser urgente fue rechazada la petición de ERC-IU-ICV y PNV de que comparezca el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, a informar de la ayuda de 420 euros mensuales que ha aprobado el Gobierno para los desempleados que no reciben ninguna prestación.
Esos dos grupos también habían solicitado que comparezca José Blanco para informar del accidente ocurrido en agosto del año pasado en Barajas y de las medidas para mejorar la seguridad. El PSOE se comprometió a que el ministro de Fomento acuda a la Cámara Baja "en los primeros días de septiembre", cuando ya se haya acordado las medidas se seguridad que se van a poner en marcha. Ante esa promesa, los diputados Gaspar Llamazares (IU) y José Ramón Beloki (PNV) retiraron su solicitud de comparecencia.