sábado, 6 de julio de 2024

- EL MAESTRO REPUBLICANO QUE PROMETIÓ EL MAR A SUS ALUMNOS.

El fin de curso soñado por el maestro republicano que prometió el mar a sus alumnos.

Un grupo de 29 niños y niñas de la Cañada Real y La Cartuja de Granada cruzan España para cumplir la promesa del profesor Antoni Benaiges, torturado y fusilado por las tropas franquistas.

Imagen de archivo de Antoni Benaiges y su grupo de alumnos en Bañuelos de Bureba.  Fundación Escuela Benaiges / Cedida

MADRID 05/07/2024 21:30 VÍCTOR LÓPEZ@VICTORRLOPZ

Antoni Benaiges aterrizó en la pequeña localidad de Bañuelos de Bureba (Burgos) en 1934. El maestro dejó atrás Mont-Roig (Tarragona) para trasladarse al campo y conseguir que todos los niños españoles pudieran ir a la escuela. Esta fue una de las propuestas estrella del Gobierno de la II RepúblicaBenaiges prometió a sus alumnos una excursión a la Costa Dorada para conocer el mar, pero las tropas franquistas lo torturaron y fusilaron antes de que pudiera cumplir su palabra. Nueve décadas después, 29 niñas y niños de entornos vulnerables emprenden ese mismo viaje y siguen los pasos del profesor.

La Escuela Benaiges, la Asociación de Educadores María de Borja y la Asociación Tabadol han puesto en marcha esta iniciativa. Los excursionistas han crecido en barrios y zonas en proceso de transformación social: 19 viven en la Cañada Real (Madrid) y los otros diez en el Sector Norte de La Cartuja (Granada). "Es una experiencia que nace con la idea de conocer otras culturas, siempre desde la convivencia y el respeto, que son los valores que defendía el maestro", señalan desde la organización.

El mar, la arena y las sombrillas son un cóctel habitual para las personas que viven o veranean en la costa, pero también un mundo por descubrir para muchas familias que nunca han salido de sus respectivos distritos. Los monitores reconocen que los niños están "nerviosos" y al mismo tiempo "distraídos" por el gran número de actividades programadas. "El colofón final va a ser conocer el mar, pero los chavales están siempre entretenidos y no lo están pensando. Será realmente una sorpresa", cuenta Javier González, secretario de la Escuela Benaiges.

Ilustración de David Ouro en '¿Qué fue el franquismo?' editado por Akal

Educar con memoria, un desafío crucial para frenar el retroceso democrático entre los jóvenes

El viaje tiene una duración de ocho días y culminará precisamente en Mont-Roig, la ciudad natal del profesor Benaiges. Los estudiantes han visitado durante esta semana el Parque Arqueológico de Atapuerca, el Memorial La Barranca y la ciudad de Zaragoza. Los educadores que acompañan a los niños aseguran que algunos descubrirán -por primera vez- este sábado a qué huele un pueblo pesquero y cómo es el movimiento de las olas. "El objetivo es visitar también la casa del maestro con sus sobrinos nietos", continúa González.

Pedro y Teresa, 'culpables' de la aventura

La vida de Antoni Benaiges llegó a la gran pantalla de la mano de Patricia Font. El maestro que prometió el mar (2023) puede entenderse como el punto de partida de esta excursión. La curiosidad llevó a dos profesores de Madrid –Carlos y Teresa– hasta la Escuela Benaiges al poco tiempo de ver la película. "Ellos hablaron con la asociación porque querían hacer realidad el sueño del maestro. Luego pusieron en marcha un crowdfunding y contactaron con las entidades que participamos en el programa", recuerda Noelia Campaña, directora y educadora de la Asociación de Educadores María de Borja.

Dicho y hecho. Las dos asociaciones implicadas llevaron a cabo un proceso de selección para escoger a una treintena de menores en los barrios donde trabajan. "El criterio fue sobre todo la edad, porque queríamos incentivar que luego pudieran seguir estudiando y entablaran relaciones de amistad", precisa Noelia Campaña. En la Cañada Real, 4.000 personas –la mitad, menores– viven desde hace tres años sin suministro eléctrico. Los cortes de luz también son recurrentes en el barrio de La Cartuja (Granada). El sector norte de la ciudad, declarado zona con necesidad de transformación social, lucha desde hace años contra la pobreza y el estigma de la marginalidad.

Imagen de Teresa, Luisa y Nuri junto a su madre, María Ferrer Ferrer, en la Maternidad de Elna.

Las tres hermanas que pasaron los mejores años de su infancia en un campo de concentración tras la Guerra Civil

"La organización ha sido todo un reto. Esta es la primera vez que lo hacemos [el viaje]. La meta era cumplir el deseo del maestro de llevar a sus alumnos a ver el mar. La aceptación y la implicación de los distintos agentes ha sido fabulosa. La idea es poder repetirlo en el tiempo, pero todo dependerá de nuestra capacidad y del presupuesto", señala Javier González. Los promotores de la iniciativa han recaudado 11.000 euros a través de donaciones para llevar a cabo el proyecto.

La importancia de una educación con Memoria

Antoni Benaiges esbozó una sonrisa cuando le taparon los ojos frente al paredón de fusilamiento. La película cuenta que antes de recibir los disparos, vislumbró el mar y no la muerte. Los golpistas dejaron sin mar a los alumnos de Bañuelos de Bureba y la figura del profesor quedó recluida en la intimidad hasta hace una década, cuando comenzaron los procesos de exhumación en la fosa del Monte de La Pedraja (Burgos). Los arqueólogos esperaban encontrar en las cunetas del enclave los restos del maestro. El cuerpo de Benaiges todavía no ha sido identificado, pero las excavaciones han servido para recuperar su Memoria.

Los 29 alumnos de la Cañada Real y La Cartuja que siguen las huellas del profesor se han reunido durante esta semana con los nietos y familiares de otras personas fusiladas durante la Guerra Civil. "Nos ha sorprendido el interés de los más pequeños y su capacidad para hacer preguntas. Los niños no entienden por qué mataban a alguien por ser sindicalista o maestro. Tenemos la obligación de ponerlos en contacto con la memoria, sobre todo para que descubran lo que pasó hace 50 o 70 años y no lo vuelvan a repetir", señala Javier González.

Daniel Rico, historiador y autor del libro '¿Quién teme a Francisco Franco?'

Daniel Rico, historiador: "La derecha es quien más teme a Francisco Franco"

Los promotores de la iniciativa contactaron con distintas asociaciones que atienden a familias en riesgo de exclusión social para emprender esta aventura conjunta y las de Tabadol y María de Borja fueron las primeras en responder. "Esto no es solo una excursión al mar, sino un canto a la convivencia y la multiculturalidad. Los valores que defendía el maestro nos han acompañado durante todo el viaje. Los sobrinos nietos de Benaiges nos esperan en Mont-Roig con los brazos abiertos. Esto también es para ellos una forma de cerrar el ciclo y cumplir el sueño del maestro", reconoce Javier González.

lunes, 1 de julio de 2024

- EL TRIBUNAL SUPREMO CONTRA LA LEY DE AMNISTÍA.

 Una decisión política del Supremo contra la amnistía.


Joaquín Urías  @jpurias  1 de julio de 2024

El Tribunal Supremo lo ha vuelto a hacer. Ha vuelto a violar la soberanía popular. Nuevamente ha decidido que su voluntad vale más que la del pueblo, expresada –como dice la Constitución– en la ley. Los jueces de nuestro más alto tribunal de justicia dejan así una vez más en el aire la pregunta de si en España es posible la democracia.

La explicación técnica de lo que han hecho es sencilla, aunque en los próximos días el aparato mediático y jurídico de la derecha nos va a intentar convencer de lo contrario. La ley de amnistía dice que no serán amnistiados los delitos de malversación cuando haya existido propósito de enriquecimiento. Para aclarar este concepto, la propia ley detalla que no se considerará enriquecimiento la aplicación de fondos públicos a finalidades independentistas “cuando, independientemente de su adecuación al ordenamiento jurídico, no haya tenido el propósito de obtener un beneficio personal de carácter patrimonial”. La norma es clara. Cristalina. Nos puede parecer mejor o peor, podemos estar o no de acuerdo con lo que dice, pero no hay duda de ello: si se usó dinero público para el referéndum del uno de octubre sin intención de obtener un beneficio patrimonial personal, es decir, sin voluntad de quedarse con dinero para ellos mismos, el delito tiene que ser amnistiado.

Donde la ley es clara, no necesita interpretación. Pero eso le da igual a los magistrados del Tribunal Supremo, que creen que su papel es hacer política y salvar a España antes que aplicar las leyes. Así que han decidido reinterpretar las leyes conforme a su propia ideología. Para justificarlo se han inventado un argumento ridículo. Dicen que, para organizar el referéndum, los líderes independentistas podían elegir entre usar dinero público o pagarlo de su bolsillo. Puesto que usaron dinero público, se ahorraron el pagarlo ellos mismos. Ese ahorro es, para cinco jueces, un enriquecimiento.

Los magistrados del Tribunal Supremo no son tontos, pero si hace falta se lo hacen. En esta ocasión parece que han pasado por alto lo más evidente. No hay ninguna prueba de (y es incluso improbable) que esos líderes, en caso de no haber tenido dinero para publicitar el referéndum, lo hubieran pagado de su bolsillo. ¿Cuánto habría puesto cada uno?, ¿habrían pagado todos?, ¿no habrían hecho el referéndum sin esos gastos? De nada de eso hay pruebas. Es un argumento infantil, rebuscado y falso. Tanto, que hay que pensar que no se trata de un error, sino que responde a la clara intención de inventarse un supuesto beneficio patrimonial donde evidentemente no lo hay. Para no amnistiarlos. Por independentistas.

Prueba de que con esta interpretación sólo están imponiendo sus propias ideas políticas por encima de la voluntad del Parlamento es que, como no saben controlarse, han trufado su decisión de consideraciones políticas. Directamente acusan al Parlamento de lenidad (literalmente, blandura en exigir el cumplimiento de los deberes o en castigar las faltas) por perdonar delitos graves. Y evidentemente, justicieros que son, deciden remediarlo.

El despropósito jurídico roza lo infame cuando para reforzar su extravagante argumento acuden a consideraciones directamente políticas y contrarias a derecho. La ley de amnistía excluye también de ella los actos tipificados como delitos que afectaran a los intereses financieros de la Unión Europea. Pues ahora dicen estos magistrados que,  como los condenados del procés buscaban la independencia de Cataluña, sus delitos afectaron “potencialmente” a los intereses financieros de la Unión Europea. Lo argumentan en que si Cataluña fuera independiente disminuirían los ingresos totales de la Unión, pues disminuiría la recaudación. Explican entonces que la declaración unilateral de independencia supuso “el debilitamiento de la fortaleza territorial de España”. Añade que es cierto que duró unos segundos pero, si no hubiera sido así y hubiera triunfado, habría podido afectar en último término a Europa. Se trata de un disparate total. Los castiga no por lo que hicieron, sino por lo que habrían podido hacer, y razona de manera diabólica: es tan absurdo como decir que cada vez que hay un homicidio disminuye la capacidad recaudatoria de la Unión Europea, o que todo el que defrauda a Hacienda está afectando a los intereses económicos europeos.

Solo una magistrada se ha atrevido a señalar que el emperador está desnudo y recuerda en su voto particular que la única interpretación razonable de la ley es que solo están fuera de la ley de amnistía las desviaciones de dinero hacia supuestos de corrupción personal. También dice que para interpretar qué son los intereses económicos de la Unión Europea el Supremo habría debido plantear una cuestión prejudicial. Nada de esto ha importado a la mayoría de jueces que, con evidente recochineo, insiste en que el texto legal tiene vida propia fuera de la voluntad del legislador y aprovecha para atacar la supuesta precipitación con la que se ha elaborado esta ley.

Es una decisión política. Un auto para defender su concepto de la unidad de España. Y para poner en su sitio a un Parlamento que el pueblo ha querido que esté controlado por progresistas y nacionalistas. Los jueces han decidido dejar claro que los únicos que mandan de verdad son ellos.

De poco nos sirve tener un Parlamento elegido democráticamente por sufragio universal si cinco jueces arrogantes son capaces de pasarse sus leyes por el forro e imponernos a todos su propia voluntad política. Estamos ya acostumbrados en España a que cualquier señor que haya demostrado en una oposición su capacidad de memorizar y repetir como un loro se crea de mejor clase que el resto de la población y se sienta legitimado para imponernos a los demás sus ideas políticas como en la más injusta de las dictaduras. En esta ocasión, los cinco jueces que se han rebelado contra la voluntad popular ni siquiera ostentan su cargo por una de esas oposiciones. Fueron nombrados directa y arbitrariamente por un órgano politizado y controlado por el partido popular.

Ahora acaba de llegarse a un acuerdo para renovar el Consejo General del Poder Judicial, que es quien elige a dedo a los jueces del Supremo. Si en el Gobierno creen que la eventualidad de que magistrados “de su cuerda” lleguen ahora al alto tribunal va a frenar la deriva antiparlamentaria de este órgano, es que no han entendido nada. El momento actual no va de mayorías, sino de decencia democrática. Porque si esto sigue así, lo más sensato será que dejemos definitivamente de votar en las elecciones. De nada nos sirve, si unos señores con tan poca vergüenza como dignidad cambian las leyes a su antojo.

Mientras unos miraban al gobierno de los jueces y se lo repartían, los jueces se convirtieron en el gobierno.